Y no es porque lo diga yo, es que ella misma lo proclama. Si no lo crees, ¿por qué lleva una cruz invertida al cuello? Pues muy sencillo, porque ella sólo sirve a un señor, a su amo. Al maligno. A Ánsar.
Con mucho cariño, para todos los hermanos hispano-catalanes. Las tres estrellas de la canción folclórica, Marianín hasta el Fin, La Pequeña Ana y La Lideresa del Oriente.